Amèlia 1 año:
Palabra favorita: NO! secundando a Dídac cuando la dice fuerte.
Actividad favorita: trepar a sillas y si la dejamos, mesas. También encajar cosas uno dentro de otra. cada vez en agujeros más chiquitos. Mirar a Dídac.
Actividad super-favorita-prohibida: Abrir con sus dientes-abrelata los potes de pomadas o cremas, y chuparlas.
Comida favorita: uvas, huevo.
Juego favorito: la música le despierta un ritmo corporal innato que le hace mover el cultivo y reír! Fiesta!!
Habilidades adquiridas en el ultimo mes (11º): desde el principio de mes aplaudir, trepar. Perfeccionando la pinza (agarra arroces y arvejas-pessols), tirar la pelota por arriba del hombro, correr arrastrando carritos. Y mediando, caminar! Ha llegado a su cumple año con una soltura admirable.
Cosas que la hacen enfadar: que no le dejes trepar o chupar pomadas. Sus quejas se hacen oír (hasta la esquina). No es la parsimonia perseverante de Didac con un año, es un estruendo sonoro de si no me lo devuelves..me van a oír!
Cosas que nos encanta hacer junta/os: darse baños. Otra diferencia con su hermanito, Amélia adora el agua.

En resumen, esta bebe que cumple un año es un pimpollo amoroso, que da ganas de apretujar suavemente y achuchar con amor. Es una nena alegre, exploradora, inquieta y curiosa, con una mirada tan vivaz y risueña que inspira amor y más amor.

Tenemos un comienzo de año difícil para mi, con mas ganas de estar al sol y jugando que de estudiar, pero no me queda opción. En dos meses y medio tengo examen. Estoy hechando de menos salidas de mamis con Nuria y Carol, excursiones furgonetas y encuentros de tribu esporlerina.. entre otras muchas cosas. Pero me quedo tranquila porque de algún modo pudimos hacer gradualmente un despegue sano, en el que Jordi tomo una parte protagónica y construyó a Dídac y Amèlia un vinculo fuerte y perdurable, y me demostró que puede apoyarme, respaldarme, enfrentar con energía y paciencia las duras tareas cotidianas del hogar y mater-paternidad.

EL cumple 1 pasó de ser un super cumple a todo trapo a una improvisación plaza-callejera con los amiguitos más cercanos del pueblo, porque un temporal la noche anterior nos dejó el fondo embarradisimo, y era impensable en hacerlo dentro con la cantidad de amigos invitados. Teóricamente postergamos, pero no creo que hagamos la segunda parte. La velita soplada, los antifaces (fabricados junto con Didac el dia antes) corrieron y espantaron a gusto. Nos damos por festejados, hasta el año que viene. No se porque pero, me parece imprescindible hacer cumples bonitos, plenos de color y juegos. A mi me marcaron momentos tan bellos en mi infancia, sobre todo con la sensación de día especial y de mis viejos esforzándose por hacerlo asi. Piñatas, globos, megalitos para los nenes, búsquedas del tesoro, disfraces. Todo eso y más, para los próximos cumpleaños.

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¿Existen bebes que se queden sentados cuando una los baña?

Esta anécdota la cuento de modo indirecto, me la comentó ayer Jordi, que lo vivió ayer en el parque del pueblo, mientras yo empollaba en la biblioteca. Jugaba Dídac tan entusiasmado a poner multas a todos los niños y adultos que pasaban, imaginarias, que Elena enternecida le dejo un boli y un papel para enriquecer su juego. Más entusiasmado aun Dídac siguió en su función de policía vocacional,  u ocasional, hasta que Darío contagiado de entusiasmo punitivo decidió arrebatarle el instrumento, el boli, y se armó una bataola. Dídac gritando y llorando inconsolable y furibundo, pero explicando claramente que Darío le había quitado sin pedir el boli que él tenia, etc etc.. hasta que su mamá, se lo quitó a Darío explicándole que era de ella y que se lo había dado a Dídac. Así, Dídac se calmó, Peri Darío no. EN esas estaban cuando aparece Dídac con otro boli y un papel para dárselo a Darío, y atrás de él la camarera del café deportivo, (el de al lado del parque) diciendo que no sabía por que o para que Dídac ( que ya se ha presentado hace tiempo) le fue a pedir eso..
Dídac resolviendo problemas, por iniciativa propia, para contentar a su amigo.
Después se fueron juntos a seguir buscando infractores.

Dídac lleva unos días durmiendo en su nueva cama-casita. en la otra habitación. El primer día estaba tan emocionado y excitado con el juego de la casita, q ue no podía dormirse. Después le fue agarrando confianza. Algunos días durmió allí toda la noche, otras se pasó por la noche a nuestra cama. Coincidiendo, nos hemos animado a dejarlo definitivamente sin pañal de dormir. No se hace pis. Anteayer se lo pusimos por las dudas porque se quedó dormido antes de ir al baño, pero a mitad de la noche se despertó y me pidió ir al baño. Un hito más cumplido en ese camino a ser un señor- esfínteres bajo control.

A Amèlia se le quedaron unos ojos color del tiempo (como la de la novela esa que leí un par de veces en mi infancia, Lil..) Pensaba que era una metáfora, pero no. A ella se le ven según la luz le pegue. ..con el sol de lleno color almendra, a La Luz tenue verdosos, en la penumbra grises.  Además tiene unas pestañas oscuras y rizadas que acaban de adornar esos ojos bellos, inusitados. Toda dulzura con sus rulos cobrizos en la frente, a lo Tin tin, y ahora, con dos dientitos nuevos arriba, recién estrenados.

El amor de Dídac por Amèlia en estos días se ha vuelto un poco demasiado intenso, ayer tuvimos que pescarlo arrastrandola cariñosamente del cuello. Hay que estar alerta con ese cariño, algunos días, que le aprieta las mejillas, le apretuja con besos, le pincha los ojos con sus deditos. o le grita fuerte en la cara, para hacerla reír. Lo más curioso es que ella ríe, (casi) siempre ríe, frente a los acosos cariños del hermano, y frente a nuestras  miradas de deses-exas-peración.