domingo, 23 de febrero de 2020

Amèlia: patata, caracol, calcetín (tatata, cococol, tin)
Tiempo de expansión del sentido del oido y más, aun, si se puede, de la imitación. Repite todos los sonidos que va oyendo, desde helicopteros a gauguas, toses.. y parlotea el día entero imitando tonadas, entonaciones, cadencias.. morimos de a amor y me recuerda tanto a ese Dídac chiquitin. También Tila lo debe recordar, porque ha encontrado otra vez compañerp, esta vez compañera, de juego. Una que no le tira d ela cola y las orejas com el otro, sino que le da comidita en la boca (comida de perro y de la otra..) la llama, Iiiaaa, Iiiiaaaa y le devuelve los limones que le trae para jugar (Tila a ella, o ella a Tila). Tila, cuanto llenas el día y cuan pocas lineas te dedicamos aqui. Que poca paciencia te tengo a veces, siempre andas en el medio enredandonos los piés o te sentás observando fijamente mi merienda o robas cosas de los platos. Pero que agradecida estoy que le muestres a mis hijos que un bicho peludo, con hocico y dientes enormes puede ser tan suavecito, y por supuesto, porque cuando Amélia te da 4 mm de pan con sus dedidos de 5.. lo agarras con una delicadeza inaudita, que no rompería apenas una pompa de jabón.

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