domingo, 16 de julio de 2017

chapa chapa chap

Julio empeza con una clase de natación de 0 a 2 años, en la piscina del pueblo. Gracias a que la mami, quien suscribe, logró juntar a unas cuantas otras mamis para que abrieran un horario razonable. El resto de concurrentes son bebés, más colaboradores y dóciles, en su mayoría. Pero Dídac ya no es un bebito, y con sus manazas y patotas, cual koala, se me aferra fuerte para no hundirse en el agua más abajo del área de las  rodillas. El prefiere la piscina bajita, calentita, y corretear gritando nenaeee, auaaa, chapaccha pa chaa, entre los críos que libremente chapotean en esa zona, e incluso, salir de la piscina por si solo, correr un trecho y tirarse otra vez (siendo atajado por la mamá (¿debería dejarlo  ?) La piscina de los grandes, más honda, y con agua que amenaza tocar el pelo, es de momento territorio hostil.
Vamos a ver si el martes que viene, retomando clases después del viajecito a Italia, se amiga con la acuosidad.




No hay comentarios:

Publicar un comentario